La principal diferencia que se puede encontrar entre los acuarios de restauración y los acuarios domésticos está en la finalidad de los acuarios en sí. Los acuarios de marisco para restauración que puedes solicitar a medida en Acuarios Océano Atlántico tienen una finalidad mucho más importante que la mera decoración o el cuidado de mascotas, pues el objetivo es ofrecer un producto al cliente y para ello las condiciones de vida en el interior del agua deben ser mucho más importantes y meticulosas.
El contenido por encima de la estética
Si muchas veces nos fijamos en los acuarios de marisco que pueden tener en muchos restaurantes nos daremos cuenta de que, aunque se encuentre en expositores en los que la estética esté cuidada o cuenten con juegos de luces que hacen que luzca más y el acuario sea llamativo, lo cierto es que la parte estética no está tan cuidada como ocurre muchas veces con los acuarios domésticos, en los que muchos usuarios invierten dinero en fondos de piedra o arenas, elementos decorativos como piedras, sistemas de burbujas o plantas de agua, etc.
Lo importante en los acuarios de restauración no es tanto esa miscelánea decorativa que cree un entorno agradable a la vista sino el espacio con el que vas a contar en el interior del acuario para almacenar en unas condiciones adecuadas a las langostas y demás piezas de marisco vivo que después esperas poder venderle al cliente. No es raro por lo tanto ver acuarios de restauración totalmente vacíos de elementos externos; solo agua, marisco y acuario.
El tamaño
Aunque siempre pueda haber excepciones, lo cierto es que por normal general los acuarios de restauración son más grandes que los de carácter doméstico. No hay que olvidar que las especies que se cuidan y mantienen en el interior de los acuarios en un restaurante son de mayor tamaño que las que generalmente habitan en los acuarios domésticos, en los cuales normalmente viven pequeños peces tropicales de aguas calientes o frías.
En Acuarios Océano Atlántico hacemos incluso acuarios a medida por encargo por si en un restaurante se busca algo muy en concreto con unas dimensiones específicas que sean capaces de cubrir un expositor, o un escaparate o que tenga una forma especial fuera de la habitual de acuario cuadrado o rectangular.
En lo doméstico podemos distinguir incluso los conceptos de acuario y pecera. Y es que mucha gente lo que tiene en su casa no es tanto un acuario como una pecera. La diferencia reside nuevamente en la importancia del tamaño. Una pecera es mucho más pequeña y cuenta con menos accesorios de depuración y cuidado del agua.
Depuración de las aguas
En ambos acuarios, los destinados a uso doméstico como los que están pensados para restauración, el filtrado de las aguas y su depuración es importante para mantener el agua limpia y los peces o mariscos que viven en el interior del acuario en unas condiciones de vida óptimas. Pero no hay que olvidar algo muy importante; las especies que están en el interior de los acuarios de restauración tienen un fin muy diferente a las domésticas; van a ser comida. El hecho de que se esté cuidando algo que después se va a cocinar implica un mayor esfuerzo y gasto en recursos de mantenimiento del agua. Por otro lado, también se debe indicar que el agua de los acuarios domésticos es dulce, mientras que en restauración los mariscos residen en agua salada.
Si estás pensando en mejorar la oferta en tu restaurante almacenando el marisco vivo y a la vista de tus clientes en un buen acuario, ponte en contacto con nosotros y en Acuarios Océano Atlántico te haremos un presupuesto para tu negocio.